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¿Cuántas cosas pasan por delante de nuestros ojos y somos incapaces de ver? Detrás de cada fotografía, vídeo o cualquier otro formato audiovisual, se encuentra una marca, un objetivo, un sentimiento. Los cinemagraphs, simplificando, no son más que imágenes o fotografías combinadas con un vídeo que pueden resultar muy atractivos para el ojo del espectador. Por eso, muchas marcas los utilizan en sus estrategias de marketing digital. Los ves más a menudo de lo que crees, y si no, compruébalo con nosotros en este post.
Are you ready?
6 ejemplos de cinemagraphs
Los cinemagraphs son muy utilizados por las empresas como parte de sus estrategias de comunicación en redes sociales, aprovechando que los contenidos visuales tienen un 70% más de alcance orgánico que cualquier texto. Combinan dos mundos que trabajan a la perfección: imágenes y vídeos. Y a continuación, vamos a mostrarte algunos ejemplos de uso con los que seguramente te habrás cruzado en alguna ocasión:
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Spot publicitario de Pizza Hut en televisión.
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Escenas de la popular serie de Netflix Stranger Things.
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Anuncio publicitario de Starbucks Coffee.
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Anuncio de televisión de Heineken, con el mensaje ‘It’s time to champion the match’.
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Publicidad de BBVA, con el agua en movimiento.
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Videoclip del cantante Carlos Sadness en su canción ‘El día que volviste a La Tierra’.
Sin embargo, estos solo son 6 ejemplos de los miles que puedes encontrar a diario en las plataformas digitales, canales de televisión o en cualquier otro lugar. Algunas herramientas conocidas para su creación son: Flapix, Pixel Motion, LoopWall y Zeotropic. Haz clic en este enlace si quieres conocer más cosas acerca de ellas.
¿Por qué deberías considerar los cinemagraphs en tu estrategia digital?
Todos nos hemos encontrao en redes sociales con alguna fotografía en movimiento. Muchas de ellas ni siquiera son vídeos, porque parte de su imagen aparece de forma estática. Estos cinemagraphs son un nuevo estilo de imágenes en pleno auge. Se lo debemos a sus creadores, Kevin Burg y Jaime Beck, un artista y un fotógrafo que impulsaron e innovaron en el mundo de la fotografía y el vídeo.
Este nuevo formato tiene un hueco muy importante en el entorno digital. Lo que en un principio formó parte de Twitter y Tumblr, poco a poco fue abarcando otras redes como Facebook e Instagram. Grandes marcas como Coca-Cola se fueron abriendo hueco en el mundo del cinemagraph con nuevos modelos de estrategia publicitaria. Lo definieron como “algo más que una fotografía pero menos que una película”.
Tú también deberías utilizar este formato como parte de tu estrategia de contenido de social media por varias razones:
- Son atractivos para el usuario. Le ayuda a comprender mejor el mensaje y retenerlo en la memoria.
- Se comparten fácilmente y pueden llegar a multitud de personas.
- El espectador puede introducirse íntegramente en la fotografía.
- Captan la atención del usuario al instante.
¿Necesitas mejorar tu estrategia gráfica en redes sociales? Cuéntanoslo. Te escuchamos.
Ventajas de usar cinemagraphs en tu estrategia comunicativa
Solo necesitas tener en cuenta 4 cosas para editar un cinemagraph perfecto:
- La idea. ¿Qué quieres comunicar?
- Una cámara de vídeo. Recuerda que la imagen está estructurada alrededor de un vídeo.
- Un trípode. La cámara debe estar lo más quieta posible para obtener un resultado de calidad.
- Un programa editor. Photoshop puede ser una gran opción para convertir el vídeo en un formato más sencillo, como el cinemagraph o el GIF animado.
Si no cuentas con todos los elementos, no te preocupes. Puedes consultar a profesionales de agencias especializadas en producción audiovisual para crear el contenido gráfico perfecto para tu estrategia comunicativa. Las ventajas pueden ser brutales:
- Contenido perfectamente adaptado al resto de la estrategia de tu marca, así como sus valores.
- Mejora la comprensión del mensaje, ya que muestra la actividad del objeto que quiere destacar en el conjunto de la imagen.
- Es compatible con todos los dispositivos móviles y navegadores, adaptándose perfectamente al diseño responsive.
- Sustituye cualquier efecto visual que pueda ser realizado de manera compleja.
- Crea valor visual para tu estrategia de comunicación y muestra una imagen más moderna, renovada y creativa de la empresa.
- Aumenta la empatía del consumidor y apela a sus emociones.
- Aporta valor añadido a la marca y aumenta el sentimiento de fidelidad.
En definitiva, los cinemagraphs son una técnica de marketing perfecta para atraer la atención de la audiencia hacia una parte del producto, que suele ser la que parece en movimiento. Ha mostrado muy buenos resultados en sectores como el turístico, la automoción y la moda, pero pueden funcionar a las mil maravillas con cualquier marca.
¿Quieres saber cómo aplicarlos en la tuya? Pregúntanos sin compromiso, te ayudamos a conocer los cinemagraphs que mejor se adaptan a tus productos y en qué canales emplearlos de forma óptima.
Algunas conclusiones sobre el uso de cinemagraphs en marketing
Aunque para muchos usuarios el cinemagraph es simplemente un GIF, es mucho más que eso. El contraste que produce la imagen estática y en movimiento permite al usuario que sus ojos se vayan solos hacia el cinemagraph, por muchos elementos que haya en la pieza. Este engagement suma valor a las empresas, sobre todo en un momento donde atraer la atención del usuario se ha convertido en una tarea difícil debido a la saturación de contenido.
Podemos hablar de un auténtico hit con muchísimo éxito entre los usuarios habituales de Pinterest, Instagram o Facebook. Aunque estas producciones parecen un formato relativamente nuevo, ya se empezaron a utilizar en 2011 para la publicidad de conocidas marcas. Por ejemplo, sus creadores las pusieron en marcha en la Semana de la Moda de Nueva York en aquel año. Lo que tiene movimiento, es interesante.
Además de las redes sociales, las imágenes en movimiento también son vitales para el encabezado de un sitio web, en las presentaciones de productos (dependiendo del producto y sector), en blogs… Cuídalos, úsalos profesionalmente, exprime todo su potencial y recuerda esto: menos es más. No es necesario saturar la página de movimiento.
Un cinemagraph bien elaborado puede resultar más memorable que cualquier palabra, gesto o relación.
